WASHINGTON..- El gobierno estadunidense anunció ayer que sus principales maniobras militares conjuntas con Corea del Sur quedan “suspendidas indefinidamente”, a pesar de que se mantienen las sanciones impuestas a Corea del Norte para que renuncie de forma permanente a su arsenal nuclear.
Dos días después de la solicitud del presidente Donald Trump de detener los ejercicios militares “provocadores” tras su encuentro con el líder norcoreano, Kim Jong–Un, un alto funcionario estadunidense dijo que “las principales maniobras militares” se suspenden “indefinidamente en la península coreana”.
El presidente sudcoreano, Moon Jae-in, mostró ayer su disposición a suspender los ejercicios militares conjuntos.
En ese escenario, Corea del Sur “necesita cambiar de forma flexible su presión militar sobre el Norte con el objetivo de crear un clima de confianza mutua, según lo acordado en la declaración de Panmunjom”, señaló Moon.
El secretario de Estado estadunidense, Mike Pompeo, se reunió en Seúl con sus aliados sudcoreanos y japoneses, ante quines reafirmó que el objetivo de Washington sigue siendo la “desnuclearización completa, verificable e irreversible de Corea del Norte”.
La decisión de suspender las maniobras militares con Sudcorea podría debilitar las defensas militares en la región, pero lo cierto es que el potencial de perjuicios diplomáticos es aún mayor.
Para los analistas y exfuncionarios estadunidenses en la región asiática se mostraron alarmados por la negativa de Trump a informarle anticipadamente a los países de Asia, e incluso a su propio Pentágono, de la decisión.
Esos ejercicios son sumamente importantes porque son un factor disuasivo”, dijo Chuck Hagel, quien fue secretario de Defensa en la presidencia de Barack Obama. Y expresó preocupado por la evidencia de que Trump subestimó las complicaciones que le ha causado al Pentágono con su decisión.
Las maniobras son mucho más que entrenamiento de rutina, un aspecto que al parecer no está incluido en la decisión de Trump. La idea es asegurarse de que las tácticas, procedimientos y planes puedan ser implementados y actualizados sin sobresaltos, y que las fuerzas estadunidenses y sudcoreanas están sincronizadas. Sirven también para dar la imagen de solidaridad entre las fuerzas aliadas, un elemento sicológico clave en el principio de la disuasión.
EU tiene fuerzas estacionadas en Corea del Sur desde que la Guerra de Corea concluyó en 1953 con un armisticio, pero sin un tratado de paz. Los soldados, que suman unos 28 mil, sirven de alerta en caso de una agresión norcoreana. (FUENTE: EFE)