CIUDAD DE MÉXICO.- A 25 años del magnicidio de Luis Donaldo Colosio Murrieta, el candidato presidencial del PRI, han surgido nuevos escenarios y detalles de lo que aconteció esa tarde del 23 de marzo de 1994 en Lomas Taurinas, Tijuana, Baja California.
Un cuarto de siglo después de esa cicatriz abierta en el tiempo, la figura de un personaje que quiso cambiar al país, acaso prematuramente, sigue engrandeciéndose.
Te presentamos una serie de reportajes que te darán una visión más detallada de lo que fue la parte más dolorosa de la historia del México moderno, aquel año en el que las balas del odio y del rencor hicieron sangrar a México.
Así fueron los últimos minutos de luis Donaldo Colosio en Lomas Taurinas
“Ya le pegaron, ya le pegaron”… así fueron los últimos minutos de luis Donaldo Colosio en Lomas Taurinas, Tijuana.
Así se enteró la viuda de Luis Donaldo Colosio de su muerte
“Y ahora, ¿qué le voy a decir a mi hijo”: Así se enteró la viuda de Luis Donaldo Colosio que el candidato presidencial había perdido la vida.
Estas fueron las palabras que dijo la viuda de Luis Donaldo Colosio cuando se enteró de su muerte
“Más no lo podía haber amado”, estas fueron las palabras que dijo la viuda de Luis Donaldo Colosio cuando se enteró de su muerte.
Así fue como los familiares de Colosio sufrieron su muerte
Testimonios escalofriantes! Así fue como los familiares de Luis Donaldo Colosio sufrieron su muerte
Ellos fueron los fiscales en la investigación del magnicidio de Luis Donaldo Colosio
¿Las investigaciones del caso Luis Donaldo Colosio estuvieron viciadas? Dos presidentes, tres procuradores y tres subprocuradores especiales no bastaron para resolver el asesinato más polémico en la historia de México.
Hay la certeza entre los mexicanos, que el discurso del 6 de marzo de 1994, pronunciado apenas dos semanas antes de su muerte, es el que habría marcado su destino.
Una sensación entre esperanza y desasosiego cubrió a los mexicanos tras escucharle aquella enorme frase en la que aseguró, hace 25 años, “yo veo un México con hambre y sed de justicia”. (Fuente: Excélsior)