CANCÚN.- “Se termina el México para pocos, se termina el Quintana Roo donde los ricos se creen dueños de todo, donde los poderosos se creen por encima de la ley. Empieza una historia diferente, de derechos para todos y no de privilegios para pocos, una historia de sueños y no de miedos”, reza el párrafo en el sector “mis propuestas” de la página oficial de la Senadora, Freyda Marybel Villegas Canché (marybelvillegas.mx).
Sin embargo, su discurso dista mucho de su realidad, pues la manera ostentosa en la que vive desde que es funcionaria pública contrasta con la ideología que ahora abraza: la austeridad republicana.
Esto se evidencia al revisarse su declaración patrimonial, llena de omisiones y hasta enriquecimiento inexplicable.
Por ejemplo, la senadora adquirió una casa en el exclusivo centro poblacional “Lagos del Sol”, ubicado en el bulevar Colosio en la Supermanzana 305, que tiene seis habitaciones (cinco recámaras y una de servicio) con un costo de 18 millones 500 mil pesos, con vista al lago, con una construcción de 900 metros cuadrados y mil 208 metros cuadrados de terreno total; esta propiedad aún no aparece en su declaración “3de3”.
Por cierto, en la plataforma “3de3”, en “bienes inmuebles del declarante”, Marybel Villegas Canché anotó que tiene una casa en Mérida, Yucatán con un valor de 500 mil pesos, que compró a crédito el 15 de mayo de 2012; así como una casa en Benito Juárez con un valor de 3 millones 85 mil 46 pesos, que también compró a crédito el 18 de diciembre de 2014; un terreno de 850 metros cuadrados en Mérida, Yucatán que compró a crédito el 15 de mayo de 2012 por 500 mil pesos.
Además de un cuarto bien: una casa en Benito Juárez, que adquirió el 22 de mayo 2006, por 1 millón 64 mil pesos, y que fue a crédito. Si la declaración es correcta, la actualmente senadora Villegas Canché en tan solo ocho años invirtió en bienes inmuebles la cantidad de 5 millones 149 mil 46 pesos.
LUJOSA COMODIDAD
El elevado precio de la casa que habita actualmente, en Lagos del Sol, se entiende al ver las características del lugar. El nombre lo toma, justamente, por la existencia de dos cuerpos de agua artificial, de más de 40 hectáreas, colocado al centro del desarrollo privado, ubicado sobre el bulevar Colosio, en los que los acaudalados habitantes pueden navegar a su antojo, o bien admirar desde su malecón y ciclopista.
Pero no es su única opción de entretenimiento, también tienen acceso a canchas de squash, tenis, voleibol, a tres albercas, incluida una semiolímpica, gimnasio, cafetería y otras amenidades.
Por si fuera poco, tienen acceso a cuatro campos de golf y a un Club de Playa de cinco estrellas con tarifa prerefencial.
Todo el lugar tiene vigilancia computalizada, con acceso restringido a través de una rampa especial que elevan únicamente cuando el vehículo pasa los filtros de seguridad. Como un puente levadizo del medioevo, pero trasladado al siglo XXI.
En este idílico y exclusivo fraccionamiento, lejos del mundanal ruido, se ha instalado la hoy senadora, sin incluirlo en su 3de3, tal vez por conflictuar con su supuesta austeridad.
ACTIVIDAD POLÍTICA
Los años de compra de sus bienes son coincidentes con sus actividades políticas; por ejemplo, la casa comprada en Cancún el 18 de diciembre 2014 por un monto de 3 millones 85 mil 46 pesos, se hizo cuando ella era diputada del PRI en la XIV Legislatura en los tiempos del gobernador Roberto Borge Angulo (2011-2016).
Además, las dos propiedades compradas en Mérida Yucatán, que suman 1 millón de pesos, fueron adquiridas el mismo día, un 15 de mayo del 2012, cuando ella fue candidata del PAN a una diputación federal por el Distrito 3 con sede en Cancún.
La propiedad en Benito Juárez, por un monto de 1 millón 64 mil pesos, Villegas Canché la adquirió el 22 de mayo de 2006, cuando fue diputada local integrante de la XI Legislatura (2005-2008), en el periodo gubernamental de Félix Arturo González Canto (2005-2011), un año dos meses después de ser legisladora.
En su “3de 3” no aparece ninguna propiedad en “Lagos del Sol”, donde ahora vive, cuando al calce de cada una de las declaraciones (patrimonial, de intereses y fiscal) se inscribe la leyenda del compromiso que contrae el declarante que señala: “Al entregar la presente declaración confirmo, bajo protesta de decir verdad, que la información presentada en esta declaración pública patrimonial es veraz y completa. Presento esta información de forma voluntaria y declaro mi conformidad con la publicación de la misma”.
Es decir, una propiedad de más de 18.5 millones de pesos que aún no aparece en su declaración patrimonial, que sumada a las anteriores da un total de 23 millones 649 mil pesos, que es lo que la senadora ha gastado en propiedades.