CIUDAD DE MÉXICO.- “La calificación de México refleja una combinación del mayor riesgo para las finanzas públicas del soberano debido al deterioro del perfil crediticio de Pemex, junto con la debilidad actual en la perspectiva macroeconómica, que se ve agravada por las amenazas externas de las tensiones comerciales, cierta incertidumbre de la política interna y las constantes restricciones fiscales”, explicó la agencia.
Según Fitch Ratings, el impacto del pasivo contingente representado por Pemex pesa cada vez más en el perfil de crédito de México, como lo demuestra la baja calificación de Fitch de Pemex a “BBB-” desde “BBB +” ocurrida en enero pasado y el perfil de crédito independiente de este último CCC”.
“Los diferenciales de la deuda de Pemex sobre la deuda soberana aumentaron sustancialmente en el primer trimestre lo que llevó al gobierno a aumentar el apoyo. El costo fiscal de ese apoyo hasta la fecha representa el 0.2% del PIB al presupuesto en inyecciones de capital y menores impuestos efectivos, pero a juicio de Fitch, no son suficientes para proporcionar una solución a largo plazo o prevenir el deterioro continuo del perfil crediticio de Pemex”, explicó.
La calificadora enfatizó que el crecimiento económico del país mantiene un bajo desempeño y los riesgos a la baja son magnificados por las amenazas del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, de imponer aranceles en México a partir del 10 de junio para obligar a que se detenga el flujo de migrantes hacia los Estados Unidos.
“El crecimiento de México continúa a la zaga de la economía más desarrollada de los Estados Unidos, a la que está estrechamente vinculada. Fitch espera que el crecimiento se acelere a partir del segundo trimestre, pero a pesar de esto alcanzará solo el 1% en 2019; esto sería consistente con un patrón de crecimiento más lento en el primer año de una nueva administración”, dijo Fitch Ratings. (FUENTE: EL UNIVERSAL)