CANCÚN.- Luego de que se difundiera en redes sociales un video en el que aparecía el joven “levantado” en el bar Distrito Cavana de Cancún, rodeado de sujetos armados y “confesando” nexos con el narcomenudeo, la madre de éste salió a desmentir hoy lo anterior, alegando la inocencia de su hijo.
Mónica Rojas argumenta que hay irregularidades en las declaraciones de Maximiliano en el video; una de ellas es que la fiscalía tiene evidencias en las que se observa al joven saliendo de Distrito Cavana, la madrugada del domingo 27 de octubre, amagado por cuatro personas de sexo masculino y nunca fue interceptado en un taxi antes de llegar a su domicilio.
En la grabación, Maximiliano González Rojas menciona que estaba de vacaciones en Estados Unidos y que había regresado a Cancún hace dos semanas; sin embargo, la madre comprobó que vivía con ella en Estados Unidos desde febrero del presente año y se encontraba en Benito Juárez de vacaciones con su padre.
Mónica, además, alega que en el video se puede notar cómo el joven recita esta serie de datos de manera sumamente estudiada o leída, por lo que señaló que fue obligado por los “encapuchados” a dar esa información.
Sobre su participación en un grupo delictivo, familiares y amigos negaron rotundamente que ”Max” se dedicara a la venta de droga, pues ni siquiera vivía en México. Otra de las inconsistencias son los nombres mencionados y la relación que el joven tiene con ellos, dice.
La madre también deslinda a su ex pareja sentimental y padre de su hijo de toda actividad fuera de la ley, pues se dedica a la docencia.
Tras la desaparición de González Rojas, la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo informó que un juez de control concedió una orden de cateo para investigar el mencionado centro nocturno por haber encontrado evidencias que relacionan al lugar con la privación ilegal del joven.
La fiscalía asegura que investigará el origen del video y se integrará a la carpeta de investigación FGE/QR/CAN/UAT/10/13282/2019 hasta dar con el paradero de Maximiliano y castigar con cárcel a quienes resulten responsables.
No obstante, la familia del joven pide a los medios de comunicación y a la sociedad civil respetar la dignidad e integridad de “Max”, pues de acuerdo al Artículo 8 de La Convención Americana de los Derechos Humanos toda persona acusada de algún delito tiene derecho a que se presuma su inocencia hasta que se compruebe lo contrario; que es culpable.