CIUDAD DE MÉXICO.- Expertos en medicina explicaron que los cubrebocas desechables no son de gran utilidad para alguien sano, si no que son las personas enfermas quienes deben utilizarlos para disminuir el riesgo de propagación.
La compra de cubrebocas desechables que pueden encontrarse en farmacias convencionales se ha desatado en México tras la confirmación de por lo menos dos casos de COVID-19 en el país. Sin embargo, médicos señalan que este tipo de cubrebocas no impiden el ser contagiado, pues su diseño no es totalmente sellado.
Peter Lin, médico familiar en Toronto, Canadá, apuntó que los cubrebocas desechables son útiles pero no necesarios. Su diseño funciona para tratar de evitar que alguien enfermo propague el virus, pero no sirve para proteger a alguien sano.
Esto debido a los poros que tiene, así como por los pliegues y huecos que se mantienen en los costados y que evitan un sellado total. El especialista dijo que lo que realmente logran este tipo de cubrebocas es impedir que nos toquemos directamente la cara con las manos.
Así mismo, concluyó que la mascarilla N95 es la adecuada para una persona sana, ya que está totalmente sellada, abarca desde la boca hasta la nariz y es capaces de filtrar hasta un 95 por ciento de las partículas.
Este tipo de cubrebocas son precisamente las que se encuentran en centros de salud y usan los doctores que atienden a pacientes con posibles síntomas de COVID-19. (Agencias)