CDMX.- El jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo, aseveró que no va renunciar a su cargo, luego que se diera a conocer una investigación periodística en la que se señala a la empresa Enerall, que él fundó en 2007, de obtener concesiones -en los últimos 10 años- para explotar la mayor cantidad de agua subterránea para uso agrícola en la Península de Yucatán y afectar la vegetación y fauna del lugar, además de ser investigada por destruir un cenote.
“Claro que no voy a renunciar, pero por su puesto que no tengo un conflicto de interés, ni medio ambiental. Hemos tenido revisiones de todos, nunca hemos tenido un problema, salvo una discusión con Profepa, tenemos ocho cenotes en custodia. Hubo un deslave, ni siquiera había agua, entonces no teníamos un problema medioambiental, cero”, afirmó Romo.
Durante una conferencia de prensa conjunta con el secretario de Hacienda, Alfonso Romo, el funcionario federal y empresario incluso invitó a los medios a acudir a la zona para verificar cómo han transformado suelos improductivos en productivos.
Añadió que respecto a la flora y fauna, “el 50% del territorio, no el 10% que nos pide el gobierno, el 50 esta reservado para especies. No se permite la entrada de armas, o cazar”.
“Todo lo que sacaron, me da risa. Por eso no voy a contestar. Estoy sumamente orgulloso de lo que hice”, aseguró.
Romo aclaró que ya no es accionista de Enerall desde 2017 o 2018 entre otras cosas porque entró al gobierno por ello no hay “ningún conflicto de interés”.
“Luego dicen que me eché los mantos freáticos. Fíjate que ignorancia con todo respeto a los reporteros. La Península de Yucatán hay ríos subterráneos. Todo lo que se llueve en Tabasco viene subterráneamente, por eso hay cenotes, y toda esa agua desemboca al Golfo y al Caribe. Si no cuidamos cómo utilizamos el agua, infectamos, lo que más infecta esas zonas es que en los pueblos que hay en la Península no hay drenaje, entonces todo se va a las aguas subterráneas”, explicó. (Agencias)