CANCÚN.- Polvo del Sahara o arena del desierto llegaría a México por la península de Yucatán la próxima semana; este polvo sirve para el desarrollo de la flora y evita catástrofes naturales severas; sin embargo, también podría causar problemas de alergias y respiratorios ante los efectos que causa en el ambiente.
El polvo del Sahara es un fenómeno natural que se origina en el norte de África, precisamente en el conocido desierto, el cual, en esta época del año y mediante diversas tormentas, se propaga por el Océano Atlántico y el mar Caribe hacia el sureste de Estados Unidos; la península de Yucatán, en México, y algunas regiones de Centroamérica.
Se estima que alrededor de 90 millones de toneladas de polvo provenientes del desierto del Sahara llegan cada año a América para generar cambios de aire y, con ello, propiciar los ciclones y tormentas que necesita el océano para liberar energía de forma dosificada y no causar desastres naturales severos.
Las toneladas del polvo del Sahara, por lo regular, llegan cada año a la región del Caribe y la península de Yucatán durante la primavera y el verano. Está cargado por elementos como hierro, calcio, fósforo, silíceo y mercurio, que hacen reacciones químicas con las propiedades del agua de mar y evitan tsunamis a gran escala o tornados acuáticos severos. Además, propicia la evolución de flora endémica en ciertas zonas, pues sirve como fertilizante natural o abono para las plantas de la región.