CDMX.- El Senado mexicano alista una reforma a la Ley de Seguridad Nacional, propuesta por el presidente, Andrés Manuel López Obrador, para restringir la presencia de agentes extranjeros, entre ellos los de la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, en inglés).
”Muestra una clara defensa a la autonomía, la independencia y la soberanía nacionales”, expresó este lunes Ricardo Monreal, presidente la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Senado, al compartir la iniciativa del mandatario. La reforma crearía un marco legal que “defina y acote” las funciones de los agentes de seguridad extranjeros en México, expuso Monreal, quien también es coordinador en el Senado del gobernante Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
Además, añadió, regularía el intercambio de información entre autoridades mexicanas y elementos extranjeros en el país, y normaría las funciones de las autoridades mexicanas de los tres órdenes de gobierno en seguridad nacional. Las modificaciones, comentó, obligarían a las embajadas y misiones extranjeras a informar a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) sobre “hechos en materia de seguridad” de los que “tengan conocimiento”.
Los agentes del exterior también deberán compartir con las autoridades de México la información “de la que se alleguen”, indicó. ”Las reformas propuestas por el Ejecutivo federal en materia de seguridad nacional representan un parteaguas en la defensa de nuestra soberanía”, defendió Monreal.
La iniciativa ocurre tras tensiones bilaterales por la captura del exjefe del Ejército de México, Salvador Cienfuegos, detenido el 15 de octubre en Los Ángeles luego de una investigación de la DEA que Washington no compartió con el Gobierno de López Obrador. El extitular de la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena) durante la presidencia de Enrique Peña Nieto (2012-2018) afrontaba cinco cargos de narcotráfico y blanqueo de dinero tras una investigación de la DEA.
Pero tras el reclamo de López Obrador, el Departamento de Justicia de Estados Unidos aceptó el 17 de noviembre retirarle los cargos y devolverlo en libertad a México, donde la Fiscalía General de la República (FGR) abrió una investigación con el expediente estadounidense.
En ese momento, el mandatario negó haber amenazado a Estados Unidos con expulsar a los agentes de la DEA del territorio mexicano. También aseguró que “no hay nada oculto” en la negociación con la administración de Donald Trump tras afrontar cuestionamientos por negarse a reconocer la victoria electoral de su rival demócrata, Joe Biden.
Sin embargo, el Wall Street Journal narró que “a López Obrador y otros funcionarios les preocupaba que el hecho de que México no pudiera detener el arresto del general Cienfuegos generaría tensiones con los militares y obstaculizaría la capacidad del gobierno para cumplir con las prioridades del presidente”.
Aun así, el líder de Morena en el Senado presumió la nueva iniciativa, que también quita la inmunidad a los agentes extranjeros y limita su trabajo al intercambio de información con México. ”Ningún presidente se había atrevido a plantearlo de manera tan firme y categórica”, manifestó Monreal. (Infobae)