CDMX.- consorcio Grupo Xcaret, propietario del parque Xenses, donde un “error humano” causó hace unos días la muerte de Leo Luna, adolescente de 13 años oriundo de Durango, pagará por el incidente cuando mucho una multa de 150 mil pesos, la más elevada que puede aplicar la dirección de protección civil municipal, informó el titular de la dependencia, Francisco Poot.
Precisó que la sanción se deberá a que el personal de Xenses no activó los protocolos de prevención y notificó del accidente el 31 de marzo, cuatro días después de que ocurrió.
El funcionario detalló que el mecanismo de prevención y seguridad que debe aplicar el personal del parque temático indica que cuando ocurre un percance debe activar protocolos, brindar primeros auxilios, aplicar medidas de reanimación cardiopulmonar y llamar al número de emergencia 911. Sin embargo, él no recibió reporte alguno y por consiguiente no envió a su equipo al sitio.
Poot recordó que representantes de Xenses argumentaron que aplicaron sus protocolos de seguridad y que el menor salió vivo del parque, pero la dirección de protección civil desconoce si entraron en acción las brigadas de seguridad, pues se le avisó de la situación días después.
Afirmó que el mismo personal del parque le garantizó que el percance fue causado por un error humano, pues al brindar mantenimiento no autorizado a la zona se dejó abierta una rejilla por la cual el muchacho fue succionado.
Según Francisco Poot, cuando protección civil llegó al establecimiento clausuró la zona donde sucedió el accidente. Mientras, la Fiscalía General del Estado (FGE) realizará investigaciones y determinará si se reabre al púbico la atracción del parque, ubicado sobre la carretera Chetumal-Puerto Juárez, en el municipio de Solidaridad, cuya cabecera es Playa del Carmen.
El costo de admisión al parque por adulto varía de mil 458.11 hasta 2 mil 579.47 pesos, de acuerdo con las atracciones que se ofrecen en diferentes paquetes.
El cardiólogo duranguense Miguel Ángel Luna visitó Xenses junto con su esposa y sus cuatro hijos el pasado 27 de marzo. El especialista aseguró que un día después, cuando pretendió llevarse el cuerpo de Leo, el vicefiscal de procesos de Quintana Roo, José Carlos Villarreal, lo amenazó con no entregarle el cadáver si no firmaba un perdón para la empresa. (La Jornada)