CDMX.- Esta mañana de viernes, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) sufrió un hackeo, como se difundió la noche anterior en el portal Latinus, y también admitió que posee algunos padecimientos médicos, como se reveló, aunque matizó que este es un asunto público que el mismo tabasqueño ha expuesto en distintas ocasiones.
El periodista Carlos Loret de Mola reaccionó a las declaraciones del Ejecutivo federal de la conferencia mañanera de este 30 de septiembre y señaló que “el presidente lo acepta: tal como revelamos, el Ejército mexicano fue objeto de un hackeo histórico”.
Ante la vulneración de los sistemas de seguridad del Ejército, López Obrador apuntó este viernes que el ataque podría haberse perpetrado desde el extranjero: “Es cierto, hubo un ataque cibernético al robo de información mediante estos mecanicismos modernos, extraen archivos, son gente especializada, no sé si en México haya especialistas en este campo”.
Loret de Mola destacó que “miles de documentos confidenciales exhiben en todo lo que ha mentido AMLO: desde su salud hasta los operativos militares.
De acuerdo con el comunicador, el gobierno federal escondió que el titular del Ejecutivo requirió hospitalizaciones y se presentaron diagnósticos médicos graves. Además, en temas de seguridad quedaron expuestos secretos del denominado “Culiacanazo” en 2019.
Con relación a la información robada por el grupo de hacker denominado “Guacamaya”, López Obrador atajó que esta es de “dominio público” y que los datos sobre su estado de salud son verdaderos: “Son ciertos, yo estoy enfermo, yo tengo varios padecimientos, lo único que no es cierto es lo del alcohol, pero si es cierto todo lo que se menciona ahí”, remarcó López Obrador.
Asu vez, el presidente de México minimizó la información difundida la noche anterior y trató de revertir los focos de atención hacia el propio Loret de Mola y dijo “sería más importante que Loret revelara la historia de la niña Frida Sofía”.
Con base en los documentos extraídos de la Sedena, los cuales ya confirmó como verídicos el mandatario mexicano durante su conferencia matutina, entre el 4 y el 20 de enero de este año López Obrador recibió al menos 10 consultas médicas, incluida la de su cardiólogo particular.
López Obrador aclaró que este ataque cibernético ocurrió durante un cambio al interior de la base de información del Ejército, y se limitó a agradecer al personal médico que le brindó atención.
“Todo lo que se dice ahí, es cierto, y se ha expresado, si acaso lo de la ambulancia que fue a Palenque a principios de enero porque había un riesgo de infarto y me llevaron al hospital […] me recomendaron un cateterismo, me dijeron ‘hay que hacerlo’, les pedí unos días, en eso me dio COVID, entonces tuvimos que esperar y me hicieron el procedimiento”, expuso en Palacio Nacional.