MOSCÚ.- Vladimir Putin acusó hoy a Occidente de amenazar la existencia misma de Rusia con la guerra de Ucrania, asegurando a los rusos que el futuro de Rusia está en juego y asustándoles con el supuesto auge de los gays y “la pedofilia” en Occidente y el inventado predominio de los “neonazis” de Ucrania.
Putin anunció que Rusia suspende su participación en el nuevo tratado START con Estados Unidos. El nuevo tratado START limita la cantidad de ojivas nucleares estratégicas que Estados Unidos y Rusia pueden desplegar, así como el despliegue de misiles y bombarderos terrestres y submarinos para lanzarlos.
Putin puntualizó que Rusia no se retira del tratado pero suspende su participación en un acuerdo que se firmó en Praga en 2010 y entró en vigor al año siguiente. Se prorrogó en 2021 por cinco años más justo después de que Joe Biden asumiera el cargo de presidente. “Estados Unidos está desarrollando nuevos tipos de armas nucleares. Y el Ministerio de Defensa de Rusia y Rosatom [la agencia atómica rusa] han de estar preparados para probar las armas nucleares rusas. Por supuesto, no seremos los primeros en hacerlo. Pero si Estados Unidos realiza pruebas, entonces nosotros también lo haremos. Nadie debería hacerse ilusiones peligrosas de que la paridad estratégica global puede ser destruida”.
Casi un año después de inicio de una guerra que iba a durar días y que ha unido a Occidente y a los ucranianos contra una invasión brutal, el líder ruso compareció ante el Parlamento flanqueado por cuatro banderas tricolores rusas a cada lado. Putin acusó a Occidente de avivar una guerra mundial para destruir a Rusia.
“Occidente está hablando de democracia pero trata de imponer sus valores totalitarios”, ha afirmado hoy el presidente ruso Vladimir Putin. “Ellos empezaron la guerra y usamos la fuerza para detenerla”, ha acusado Putin.
Con rostro serio y en muchos casos el ceño fruncido, le escuchaba la obediente élite política y militar de Rusia. Putin les garantizó que el país “resolverá las tareas que enfrentamos”. Porque “Rusia es invencible en el campo de batalla”. La élite occidental “no esconde su objetivo: infligir una derrota estratégica a Rusia, es decir, acabar con nosotros de una vez por todas”, añadió.
“Fomentar la rusofobia, acabar con Rusia y transformar un conflicto local en uno global”, continuó. “Defenderemos a nuestros niños de la degradación de Occidente, que quiere quebrar nuestra sociedad”, sentenció.