PLAYA DEL CARMEN.- La empresa estadounidense Vulcan Materials, matriz de Sactún (ex Calica) amplió el monto que exige como indemnización al gobierno mexicano a más de mil 900 millones de pesos, por la interrupción de su explotación de materiales pétreos en las canteras que tiene en la Riviera Maya.
La empresa había ingresado una demanda arbitral en 2018 por mil 529 millones de pesos, ante el Centro Internacional de Arreglo de Disputas de Inversión (CIADI) del Banco Mundial, la que fue aumentada a más de mil 900 el año pasado, luego que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente clausuró la extracción de sascab en su cantera “La Rosita”, la única que todavía mantenían en operación.
Esta ampliación a su demanda había sido mantenida en secreto por la empresa, pero fue dada a conocer en días pasados por la Secretaría de Economía, según publicó ayer el periódico Reforma.
La empresa estadounidense alega que la suspensión de sus actividades es una violación al Tratado de Libero Comercio de América del Norte.
La Profepa señaló en su momento que Sactun excedió el monto permitido de extracción, pero la empresa alega que no hay un volumen específico marcado en la concesión que tienen hasta el año 2037.
Cabe destacar que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha dicho en muchas ocasiones que la extracción de material pétreo por parte de Calica es incompatible con la vocación turística de Quintana Roo y supone un gigantesco daño al medio ambiente.
Durante su última visita a Chetumal, aseveró que ya no se le permitiría a esta empresa continuar dañando el medio ambiente.
A este conflicto, se añade el litigio que mantenía Sactún con Cemex, usuario de la terminal marítima de Punta Venado, concesionada a la empresa estadounidense.
Después que Cemex no logró llegar a un acuerdo para renovar su contrato por el uso del espacio, la empresa mexicana obtuvo una orden judicial para que se le respete su concesión, por lo que esta terminal fue ocupada por personal del Ejército Mexicano, para dar cumplimiento al mandato.
La semana pasada, Sactun llegó a un acuerdo con Cemex, por lo que las fuerzas armadas se retiraron del lugar. Sin embargo, esta movilización, aunque ordenada por un juez, fue criticada por autoridades de Estados Unidos, al enmarcarla dentro de la campaña del gobierno mexicano en contra de esta empresa de Alabama.
De acuerdo a Reforma, todavía faltan varios meses para que el tribunal internacional llegue a una resolución. La siguiente audiencia está agendada para julio.