NUEVO LEÓN.- El estado de Nuevo León cumple el día de hoy 48 horas con dos gobernadores, uno electo constitucionalmente y con licencia de seis meses, Samuel García, y otro, Luis Orozco, el vicefiscal estatal, designado como interino por el Congreso de dicha entidad Federativa, en una crisis política sin precedentes, provocada por el primero de ellos.
La noche del viernes Luis Enrique Orozco se presentó al Palacio de Gobierno de Nuevo León para asumir funciones, y ahí fue enterado por el secretario general, Javier Navarro, que Samuel García regresó a ejercer el cargo; Orozco sostuvo que su nombramiento estaba firme, como ayer confirmó el Congreso al ratificar que la licencia de García y el nombramiento de Orozco continuaban vigentes. Orozco no pudo asumir porque el Palacio de Gobierno de Nuevo León amaneció cerrado y con presencia policial en su interior.
Los hechos dividieron opiniones. Claudia Sheinbaum, coordinadora de la Cuarta Transformación, reprobó el intento del “Prian” de colocar un interino afín, en lugar de un integrante de Movimiento Ciudadano, “las elecciones se ganan con votos”, dijo; mientras Xóchitl Gálvez, coordinadora del frente opositor, sostuvo que Nuevo León no merece esto, “retar la legalidad no es correcto”, señaló; Luis Donaldo Colosio, alcalde de Monterrey, amagó con solicitar desaparición de poderes y la intervención del Senado de la República para nombrar al interino, en tanto Movimiento Ciudadano analiza Plan B para la postulación de otro candidato a la presidencia de la República.
El 18 de octubre el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación rechazó una petición del gobernador Samuel García, donde solicitaba autorización para separarse del cargo por seis meses para contender por la candidatura a la presidencia de la República por el partido Movimiento Ciudadano, dejando como gobernador interino al secretario General, Javier Navarro Velasco.
El Trife confirmó que el procedimiento de licencia debería realizarse ante el Congreso del Estado, por lo que el gobernador Samuel García acudió ante los diputados el 23 de octubre, dejando como sustituto en el cargo a Javier Navarro por ministerio de ley.
El Congreso autorizó la licencia de Samuel García, por seis meses, el 26 de octubre, con el voto de 38 de los 41 legisladores, pero como gobernador interino designo al abogado Arturo Salinas Garza, que se acababa de separar del cargo de presidente del Tribunal Superior de Justicia, con 27 votos a favor, 11 en contra y tres abstenciones.
El 19 de noviembre publicó el gobernador Samuel García en el Periódico Oficial de Nuevo León, que tomará una licencia del 20 de noviembre del 2023 al 18 de enero del 2024, y que en su lugar quedaría el secretario General, Javier Navarro, como encargado de despacho por ministerio de ley, conforme al artículo 121 de la constitución local, que regula las licencias menores a 30 días.
El 28 de noviembre regresó Samuel García como gobernador, lo cual anunció a través del Periódico Oficial, anticipando que tomaría licencia a partir del primer minuto del dos de diciembre, para cumplir con el requisito de estar separado del puesto con seis meses de anticipación a la jornada electoral presidencial del 2024. Javier Navarro retomó el puesto como secretario General.
El primero de diciembre, a unas horas de entrar en vigor la licencia otorgada por el Congreso del Estado, Samuel García, reiteró que dejaría en el cargo a Navarro por ministerio de ley, con base en una suspensión definitiva otorgada por el Juez Tercero de Distrito en Materia de Trabajo en la Ciudad de México, para que funja como Encargado del despacho del Ejecutivo Estatal mientras el Congreso local designa a un interino de Movimiento Ciudadano y por unanimidad de votos, al tiempo que revoca la designación de Luis Enrique Orozco como gobernador interino, ordenando la intervención de la Guardia Nacional.
Esa misma noche, poco antes del dos de diciembre, la Suprema Corte de Justicia de la Nación, resolvió la controversia constitucional presentada por el Congreso del Estado de Nuevo León, reiterando que debe respetarse el interinato de Luis Enrique Orozco como gobernador y prohibiendo al gobierno de Nuevo León realizar nueva designación o nombramiento alguno sobre la titularidad del Poder Ejecutivo sin importar su denominación, hasta que se resuelva en definitiva dicho procedimiento.
Lo anterior, explicó la Corte en un comunicado, con el fin de evitar la indefinición en la titularidad del Poder Ejecutivo de Nuevo León y para garantizar la gobernabilidad y seguridad del funcionario para el periodo otorgado en la licencia de Samuel García otorgada por seis meses.
Luis Enrique Orozco se presentó al Palacio de Gobierno para asumir el cargo el primer minuto del día de ayer, momento en que el secretario general, Javier Navarro, intentó notificarle un documento dirigido al público en general, en el cual Samuel García anunciaba su regresó a la gubernatura y daba por revocada la solicitud de licencia; esa misma madrugada, se presentó Samuel García en palacio para reasumir.
Ayer el Congreso de Nuevo León mediante un comunicado de prensa, advirtió que “si el ciudadano Samuel García Sepúlveda quiere quedarse ilegalmente en su cargo, será bajo su responsabilidad constitucional y electoral; reitero no existe ningún impedimento con la licencia de separación del cargo, ésta sigue vigente”.
El gobernador interino, Luis Enrique Orozco, trató de pasar revista a la fuerza policial estatal durante la mañana, pero le fue impedido el paso a las instalaciones. Acusó que el secretario de seguridad pública desoyó sus instrucciones.