LIMA.- La policía y la fiscalía de Perú llevaron a cabo un allanamiento sorpresa en la casa de la presidenta Dina Boluarte y en el palacio de gobierno a primera hora del sábado, como parte de una investigación por “enriquecimiento ilícito” tras las noticias de que se la había visto llevando relojes Rolex desde que asumió el cargo.
El allanamiento, que se produjo cuando los peruanos celebraban el feriado de Semana Santa, conmocionó a mucha gente, incluso en un país que se ha acostumbrado en las últimas dos décadas a que los políticos sean investigados por presunta corrupción.
Antes de la medianoche del Viernes Santo, la policía utilizó una comba para entrar por la fuerza en la casa de Boluarte en Lima, según la cobertura en directo de Latina Noticias. Los fiscales y la policía registraron a continuación el despacho de Boluarte y su residencia en el palacio de gobierno.
La presidenta no se había presentado esta semana a una cita programada con los fiscales para mostrarles tres relojes Rolex que ha usado y explicar su procedencia. También se negó a permitirles entrar en su casa para ejecutar una orden de registro, según el fiscal general Juan Villena, quien dijo a los legisladores que su negativa era “un claro indicador de rebeldía”.
La investigación a Boluarte comenzó el 18 de marzo, después de que el programa de noticias por internet La Encerrona reveló que la mandataria había empezado a llevar relojes cada vez más caros, entre ellos al menos un Rolex, desde que asumió el cargo en diciembre de 2022. Los fiscales sospechan que ha violado las leyes del país contra el enriquecimiento ilícito y no ha declarado bienes de lujo. En Perú, las autoridades electas deben informar al gobierno de cualquier activo cuyo valor supere los 10.300 soles, unos 2774 dólares, y consignar cualquier regalo recibido de terceros.
Los medios de comunicación locales han informado desde entonces que Boluarte ha llevado otros tres relojes Rolex, así como una pulsera Cartier de 50.000 dólares, y que las autoridades bancarias han detectado unos 300.000 dólares en depósitos de origen desconocido realizados en sus cuentas personales antes de que asumiera el cargo.
Según La Encerrona, los modelos de relojes Rolex que ha llevado cuestan al menos 14.000 dólares.
Boluarte ha negado haber cometido irregularidades, pero también se ha rehusado a explicar públicamente el origen de los Rolex, limitándose a decir que el primer reloj Rolex que llamó la atención era un artículo “de antaño”. “En mi ADN está no ser corrupta”, declaró a los periodistas. “Lo que tengo es fruto de mi esfuerzo y de mi trabajo”.
En un discurso televisado el sábado, Boluarte, flanqueada por los ministros de su gabinete, culpó a los medios de comunicación de crear “cortinas de humo” que alimentan el “caos” y la “incertidumbre”.
“Soy una mujer honesta. Entré a palacio de gobierno con las manos limpias y así me retiraré en el año 2026”, dijo. “Hoy marchemos por la verdad, por la idoneidad, por abrazarnos todos en un solo corazón”.