CDMX.- La Secretaría de la Defensa Nacional perdió un juicio en el que exigía la devolución de un anticipo de más de 86 millones de pesos a una empresa a la que contrató para surtirle balasto para el tramo 6 del Tren Maya, aduciendo retrasos en la entrega del material y por lo cual rescindió el contrato.
La empresa protestó y ganó el litigio al demostrar que le fue rescindido por un militar que no tenía la atribución para hacerlo.
El tramo 6 va de Tulum a Chetumal, donde se han enfrentado retrasos para la terminación de la obra. Aunque el tren de pasajeros ya circula, la infraestructura no ha sido concluida al 100%. El expresidente Andrés Manuel López Obrador entregó a las prisas, en sus últimos días de gobierno, parte de la obra y fue en diciembre pasado cuando la presidenta Claudia Sheinbaum logró poner en operación los más de 200 kilómetros de vía.
A la par, el pasado 2 de enero la Sala Superior del Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJA) publicó una sentencia definitiva de un juicio de nulidad administrativa que no favoreció al Ejército, el cual no podrá recuperar un monto millonario por incumplimiento de contrato.
Se trata de la rescisión del contrato identificado con el expediente D.G.INGS.-AIFA-T7-F5-MRA0120-CONV-PL-A-2022-C-ITP-001.
En octubre de 2024 ya había dado a conocer una primera sentencia resuelta por la Séptima Sala Regional Metropolitana del TFJA, relacionada con este mismo caso, que al final fue atraído por la Sala Superior.
El contrato fue firmado por el general Gustavo Ricardo Vallejo Suárez, comandante del Agrupamiento de Ingenieros de la Sedena, y la empresa Energía Solar y Proyectos de Ingeniería, esta última encargada de surtir balasto para el tramo 6 del Tren Maya, de acuerdo con documentos a los que Proceso tuvo acceso.
Ambos celebraron el contrato el 4 de octubre de 2022, por un monto de 535 millones 446 mil 799 pesos, mismo que debió concluir el 31 de diciembre de 2023. El objeto fue el suministro de más 208 mil 903 metros cúbicos de piedra triturada de balasto para su acopio en Chetumal y Bacalar, Quintana Roo, donde se desarrolló el tramo 6 de la vía del Tren Maya, de reciente apertura, entre la selva y sobre una longitud de 256 kilómetros que inicia en Tulum.