UCRANIA.- El bombardeo de una maternidad y hospital infantil en Mariúpol, una ciudad al sureste de Ucrania, generó este miércoles indignación alrededor del mundo.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, responsabilizó al ejército ruso del ataque, y lo describió como “un crimen de guerra”.
El vicealcalde de Mariúpol, Sergei Orlov, le dijo a la BBC que tres personas, incluido un niño, murieron en el ataque. Según los informes, hubo al menos otras 17 personas que resultaron heridas, algunas de los cuales son mujeres embarazadas.
“Estoy absolutamente seguro de que [las tropas rusas] conocen esta instalación. Este es el tercer hospital que están destruyendo en esta ciudad”, ledijo a la BBC.
Rusia insiste en que los combatientes ucranianos sacaron al personal y a los pacientes del hospital y establecieron allí sus posiciones.