PLEAMAR
Por Lenin Amaro Betancourt
Intensificar la Guerra Sucia contra AMLO, la única alternativa de sus adversarios
Ante lo evidente, el triunfo de la candidatura de Andrés Manuel López Obrador y su Proyecto de Nación a la Presidencia de la República, el sistema priista aún en el poder no ha tenido mayores alternativas que enrarecer la guerra sucia en contra del candidato tabasqueño.
Pero éste, es un tema que debiera ocuparnos más a los mexicanos, pues más allá de la simple intentona mediática (el término no sólo se refiere a los medios periodísticos), los responsables de la campaña negra están violentando severamente diversas disposiciones legales y además, están atentando contra la paz social de nuestro país, hecho que desde ya nos debe poner en acción para no sólo denunciarlo.
A quien escribe, como a cientos de miles de mexicanos nos han llegado llamadas telefónicas con argumentos como: que “AMLO puso en una candidatura plurinominal a una secuestradora, Nestora Salgado y que si alguien así queremos para presidente papanatas”; palabras más, palabras menos se han ubicado a través de más de 300 número a lo largo del país haciendo ese tipo de llamadas; en lo personal lo recibí del número (55) 4125 0364.
Estas llamadas se suman a los comunicados y videos de varios de los hombres más ricos de México en los cuales se pretende denostar a Andrés Manuel. La mala noticia para ellos es que estas intentonas, se convierten en un Boomerang que en lugar de quitarle votos lo fortalecen en la recta final del proceso electoral que se llevará a cabo el próximo domingo mingo primero de julio.
Aún y cuando la estrategia es un pésimo “chiste”, los hechos delictivos se incrementan y cuentan además con el auspicio de las dependencias del Gobierno Federal y sus titulares; durante una reunión con autoridades de la Fiscalía Especializada en Atención a Delitos Electorales (Fepade), la dependencia ha advertido que no tiene facultades para contar con información sobre los titulares de los números telefónicos a través de los cuales se hacen las llamadas.
Lo que sí podemos advertir, es que este tipo de campañas negras no están en el margen de la legalidad y lo delicado, es que con base en la legislación federal, actos como este, en donde varias personas ocupan medios como las llamadas telefónicas para incluir negativamente en los ciudadanos, estarían cayendo en el supuesto de Delincuencia Organizada, pues este tipo de estrategias son exactamente las mismas que la delincuencia ocupa para el secuestro exprés, el secuestro, la estafa, la extorsión o cualquier otro tipo de delito.
Pero además, apunta a una reacción anunciada en el escenario que ya nadie puede negar, es decir, el triunfo de AMLO en la próxima contienda electoral del primero de julio, pues los entre 15 y 20 por ciento que las encuestas le otorgan como ventaja sobre su más cercano competidor, Ricardo Anaya, a estas alturas de la contienda parece ya ser irreversible.
Hay que recordar que un resultado electoral con más de 10 puntos de ventaja, ya no permiten siquiera el margen para el fraude electrónico. Lo importante es no permitir que este tipo de estrategias nos muevan el ánimo. Trasciende la histórica responsabilidad de salir a votar en libertad y no permitir que los oscuros intereses de la clase favorecida por este gobierno priista nos prive de aspirar a la democracia.
Saludos,