La esposa del narcotraficante mexicano “El Chapo” Guzmán, Emma Coronel, ha sido condenada a 3 años (36 meses) de prisión, culpable de tres delitos que incluían distribuir heroína, cocaína, marihuana y metanfetamina para su importación al país norteamericano, tal como conspiración para lavar instrumentos monetarios y participación en transacciones y tratos de una importante organización extranjera de narcotráfico designada. El pasado mes de junio, “el amor de la vida” de uno de los delincuentes más perseguidos hasta su detención se declaró culpable de estos delitos.
“Estoy aquí ante ustedes, pidiéndoles perdón”, dijo a través de un intérprete del tribunal. “Aunque el efecto global de la conducta de la acusada fue significativo, el papel real de la acusada fue mínimo. La acusada actuó principalmente en apoyo de su marido”, dijo el fiscal federal Anthony Nardozzi.
Añadió que, tras su detención, “aceptó rápidamente la responsabilidad de su conducta delictiva”. “Ella conoció a Joaquín Guzmán cuando era menor de edad. Tenía 17 años y se casó con él cuando cumplió 18″, dijo su abogado Jeffrey Lichtman.
Añadió que ahora se encuentra en peligro, señalando que fuentes anónimas de las fuerzas del orden dijeron a los medios de comunicación que ella estaba cooperando con el gobierno. “No estoy seguro de que pueda volver a casa”, dijo.
Coronel, una ex reina de la belleza nacida en Estados Unidos que se casó con Guzmán cuando era adolescente, fue detenida en el aeropuerto internacional de Dulles, en las afueras de Washington, en febrero. Como parte de su acuerdo de culpabilidad con los fiscales, Coronel admitió haber actuado como mensajera entre Guzmán y otros miembros del cártel de Sinaloa mientras estaba recluido en la prisión mexicana del Altiplano tras su detención en 2014.
“La acusada cometió un grave delito contra los Estados Unidos”, escribieron los fiscales en su nota de sentencia. “Dado el impacto adverso que el tráfico de drogas tiene en la sociedad y los graves efectos perjudiciales de la cocaína, la heroína, la metanfetamina y la marihuana en las comunidades, es importante que el Tribunal imponga una sentencia que disuada a otros de socavar el estado de derecho”.
Hasta antes de su declaración de culpabilidad, se hablaba de una posible participación de Coronel en el Cartel que lideraba su esposo. Pero no fue acusada entonces de ningún delito. Su representación legal desestimó todos los señalamientos y siempre había negado estar involucrada en actividades ilícitas, aunque luego el Departamento de Justicia estadounidense le formuló cargos de conspiración para distribuir drogas ilícitas en este país, de lo que se declaró culpable en junio de 2021.
Coronel enfrenta cargos de conspiración por distribuir un kilogramo o más de heroína, cinco kilos o más de cocaína, una tonelada o más de marihuana y 500 gramos o más de metanfetaminas, de acuerdo con el Departamento de Justicia. Según su abogada, en ningún momento cooperó por miedo al cartel de su esposo, pues los magistrados de la pareja reiteraron que su clienta no quería tener cuentas pendientes con una organización criminal que no perdona a quienes bridan información a las autoridades.