CANCÚN.- La invitación hecha por el presidente Andrés Manuel López Obrador a Carlos Joaquín González es para que se integre a su gabinete, confirmó el gobernador quintanarroense, quien aseguró no saber nada sobre cuál puesto sería.
En una rueda de prensa, luego de la inauguración de una cumbre de inversionistas en esta ciudad, el gobernador dijo agradecer los comentarios del presidente esta mañana, quien dio como un hecho su integración a su administración, por lo que dijo que esperará a hablar con él para saber más.
— ¿Algún puesto? — se le preguntó.
— No lo sé, no tengo la menor idea.
Pese a esta respuesta, al preguntarle la prensa de nuevo, él sí indicó que la invitación es para sumarse al gabinete, por lo que no se trata de aceptar un cargo de embajador en el extranjero.
Con el secretario de Turismo, Miguel Torruco Marqués, parado a dos metros de distancia, se le preguntó al gobernador si le gustaría ir a esa dependencia, pero él contestó que todas tienen su importancia.
NO NECESITA QUE NADIE LE CUIDE LAS ESPALDAS
Como ayer, el gobernador reiteró que no ha roto con el PAN y PRD, a quienes les agradece el haberle permitido llegar a la gubernatura. Él tiene amigos en todos los partidos y no milita en ninguno, aseveró.
Rechazó que él vaya a sugerir o proponer a algún integrante de su equipo a la gobernadora electa Mara Lezama, quien será la que decida a quién incluir en su gobierno.
Interrogado por la fotografía del proceso de entrega-recepción, en donde el secretario de Seguridad Pública figura del lado de Mara Lezama, el gobernador señaló que así quedaron por azar, ya que el recinto, el Salón del Mestizaje en Chetumal, era muy pequeño.
Sobre si había movido “sus fichas” con el paso de Cristina Torres a Morena y Yohanet Torres al PVEM, el gobernador dijo que eso fue decisión de ellas. Una le comentó previamente que daría ese paso y él le dio sus comentarios, que se reserva, pero “cada quien tiene sus responsabilidades”.
El gobernador negó que quiera “blindar” su salida y aseveró que no necesita que nadie le cuide las espaldas, pues eso lo hace él solo.
Desde hace varios meses se trabaja en poder relaizar una entrega clara y transparentes, insistió.
Ante la pregunta de si teme acabar en prisión, como su antecesor Roberto Borge, Carlos Joaquín señaló que a la cárcel van quienes tienen algún tema pendiente por pagar, lo que no es “para nada” su situación.
“Puedo verlos a todos a los ojos y también a mis hijos”, afirmó.
AGUAKAN
Por otro lado, el gobernador confesó no saber mucho sobre la consulta popular sobre la concesionaria Aguakan, que el Ieqroo ayer determinó que era vinculante en tres municipios. Todavía no han sido notificados y es un tema que le tocará al siguiente gobierno, ya que no les dará el tiempo.
Joaquín González recordó que su gobienro emprendió acciones jurídicas desde el primer día, para resolver las quejas e incumplimientos de la concesión, con denuncias presentadas en tribunales.
Estimó que eso debe continuar, pero la consulta obligará a tomar acciones diferentes.
Sobre si Aguakan debe irse, opinó que debe hacérsele cumplir, fijándole metas en servicio, inversión y precios.
En cuanto a la Ley Vicaria aprobada ayer por el Congreso del Estado, viene a responder una gran cantidad de solicitudes de una legislación así. Al Ejecutivo le tocará analizar lo aprobado pero “tengo entendido que está mejorada y cumple con las condiciones”.
El gobernador también confirmó que acaba su gobierno con el mismo número de notarías con el que empezó, 137, sin caer en la vieja práctica de entregar patentes a allegados, como ocurría en sexenios anteirores.