CDMX.- La Secretaría de Salud confirmó que México ya registró un caso de trombocitopenia que podría estar asociado a la aplicación de la vacuna contra COVID-19 de AstraZeneca, lo que será investigado por un grupo de personas expertas.
Hugo López-Gatell, Subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, detalló que el evento supuestamente atribuible a la vacunación o inmunización, ESAVI, como lo denomina la Secretaría de Salud, se detectó en un hombre de 92 años del Estado de México que ha presentado disminución de plaquetas.
“Me adelanto a una pregunta que posiblemente van a hacer porque hoy fue motivo de comentario en algunos periódicos de circulación nacional, sobre el caso de un señor de 92 años que fue atendido en el Estado de México, en un hospital privado, por un médico hematólogo que comentó o nos notificó a la autoridad sanitaria local en el Estado de México y también por lo tanto a la federal sobre el padecimiento que ha presentado con disminución de plaquetas, médicamente esto se llama trombocitopenia, reducción en el número de plaquetas, que son los elementos de la sangre, las que ayudan a la coagulación, los elementos que tienen formas, son fragmentos celulares que contribuyen a la coagulación”, expuso en conferencia desde Palacio Nacional.
El funcionario adelantó que los síntomas del hombre podrían corresponder con uno de los componentes del síndrome descrito como “potencialmente asociado con la vacuna de AstraZeneca”.
López-Gatell destacó que el síndrome es “muy raro”, pues se estima que a nivel mundial se han detectado cuatro por cada millón de personas.
José Luis Alomía, director general de Epidemiología, informó que un Comité Nacional de Expertos evaluará este primer caso de trombocitopenia.
“Este caso será presentado a este Comité Nacional de Expertos la próxima semana, entonces iniciará el proceso de dictaminación”, informó.
LOS EFECTOS DE ASTRAZENECA
La confirmación de que la vacuna de AstraZeneca puede causar trombos en algunas personas, aunque sean casos extremadamente raros, ha multiplicado las dudas entre la población sobre un fármaco apoyado por autoridades sanitarias internacionales y cuestionado en diversos países.
Los efectos secundarios más comunes de esta vacuna durante los ensayos fueron generalmente leves o moderados: dolor y sensibilidad en el lugar de la inyección, dolores de cabeza, cansancio, molestias musculares, sensación general de malestar, escalofríos, fiebre, dolor en las articulaciones y náuseas. Afectaron a más de una de cada 10 personas y mejoraron días después.
Como máximo uno de cada 10 vacunados puede notar enrojecimiento o hinchazón en la zona del pinchazo, registrar fiebre superior a 38 grados o sufrir vómitos o diarrea, según la documentación de AstraZeneca aprobada por la EMA, que menciona como efectos poco frecuentes (una de cada 100 personas o menos) mareos, disminución del apetito, dolor abdominal, sudoración y sarpullidos.