NUEVO LEÓN.- Debanhi Susana Escobar Bazaldúa fue asesinada por asfixia por sofocación al menos de tres días a cinco días antes de que hallaran su cadáver, así lo confirmó la Fiscalía General del Estado de Nuevo León (FGE) este lunes 18 de julio después del tercer dictamen forense practicado al cuerpo de la joven de 18 años. Además de que no se encontró evidencia que pudiera sustentar violencia sexual y se descartó por completo la asfixia por sumersión.
A través de una rueda de prensa de la Fiscalía de Nuevo León, encabezada por el fiscal general de Justicia de Nuevo León, Gustavo Adolfo Guerrero y Ricardo Mejía Berdeja, subsecretario de la Secretaría de Seguridad del Gobierno de México (SSPC) dieron a conocer los detalles sobre la muerte de Debanhi. Además de que los padres de Debanhi, Mario Escobar y Dolores Bazaldúa, se encontraban en ésta.
Cabe destacar que la conferencia de prensa, convocada a las 17:30 horas, se vio retrasada más de una hora y media debido a una reunión del padre de Debanhi con las autoridades, en las que supuestamente le dieron detalles de los resultados de la tercera autopsia. Sin embargo, no se permitieron las preguntas de los medios de comunicación.
Se designaron para ello a tres especialistas en medicina forense: la Doctora Fabiola González, el Doctor Mario Álvarez y el Doctor José Luis Olivares del Instituto de Servicios Periciales y Ciencias Forenses, en conjunto con el Doctor Najera Ochoa de Guatemala avalado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), quienes concluyeron cuatro puntos cruciales en el caso.
El Doctor Felipe Edmundo Takashi Medina fue el responsable de dar los resultados: “Se pueden llegar a las siguientes conclusiones: la primera de ella es que se tienen los elementos suficientes, necesarios para establecer que la causa de muerte de Debanhi Susana Escobar Bazaldúa se debió a una asfixia por sofocación en su variedad de obstrucción de orificios respiratorios”.
Después comentó que el intervalo post mortem que se estableció con base a los hallazgos macroscópicos y los signos cadavéricos es de tres a cinco días a partir de la localización de la víctima. La tercera conclusión es que no se encontró ninguna evidencia o hallazgo que indicara abuso sexual; por último es que se descartó por completo la asfixia por sumersión.
Por su parte, el fiscal Gustavo Adolfo Guerrero indicó que aún faltan realizar más estudios: “Debemos considerar que hay dictámenes médicos aún en proceso, están pendientes por entregar los resultados químicos que elaboró la Universidad de Londres”.