VILLAHERMOSA.- El gobierno federal logró un hito en seguridad para Tabasco con un operativo que redujo los homicidios dolosos en un 42% en poco más de un mes. Por instrucción de la presidenta Claudia Sheinbaum, desde el 15 de febrero, las fuerzas federales desplegaron un plan estratégico con Ejército, Marina y la Secretaría de Seguridad. “Reforzamos presencia y capturamos objetivos prioritarios”, declaró Omar García Harfuch, titular de Seguridad federal.
Entre los golpes más contundentes está la captura de Rodolfo “N” alias “El Cubano”, vinculado a la masacre de un bar con seis muertos. Detenido el 9 de marzo, este presunto líder criminal era buscado por el ataque del 24 de noviembre en el que también hubo diez heridos. La estrategia no solo frenó violencia, sino que desarticuló células peligrosas.
Otro éxito clave fue la aprehensión de Francisco Javier “N”, alias “El Guasón”, quien controlaba narcomenudeo y extorsiones. Capturado el 27 de marzo, este sujeto aterrorizaba comerciantes y ordenaba ataques contra grupos rivales. Su caída debilitó una red que operaba con impunidad en la zona. Las autoridades aseguran que su detención fue un punto de inflexión en la pacificación.
Las acciones continuaron con la captura de Jorge “N” alias “El Chelo” y Edson “N”, alias ‘Zavala’, integrantes de “La Barredora”. Ambos fueron detenidos el 29 de marzo en Cárdenas, Tabasco, por su presunta participación en crímenes violentos. “No hay tregua para quienes siembran terror”, enfatizó García Harfuch. Estos arrestos demostraron la coordinación efectiva entre fuerzas federales y estatales.
Uno de los casos más relevantes fue la recaptura de Adrián “La Geisha” Rosario Vidal Flores, fugado desde 2023. Aprehendido el 3 de abril, este peligroso criminal acumula órdenes por secuestro, homicidio y ataques a autoridades. Tras su detención, su grupo quemó vehículos en represalia, pero las autoridades sofocaron rápidamente los disturbios.
El operativo no solo frenó crímenes, sino que restauró confianza en zonas antes dominadas por el crimen. Con más patrullajes y presencia militar, Tabasco vive un respiro tras años de violencia. Sheinbaum ha calificado estos resultados como “un paso firme hacia la paz”, aunque reconoce que el desafío sigue.
El modelo aplicado en Tabasco podría replicarse en otros estados con alta incidencia delictiva. La combinación de inteligencia, fuerza y colaboración ciudadana está dando resultados. “Vamos por más”, advirtió García Harfuch, dejando claro que la guerra contra el crimen no da marcha atrás.