EUROPA.- Desde que se declararon los primeros casos de viruela del mono a nivel global, los contagios han ido sucediéndose a lo largo y ancho de Europa y Estados Unidos y cada vez son más los detalles que la ciencia esclarece acerca del virus. La enfermedad fue declarada Emergencia de Salud Pública de Importancia Internacional por la Organización Mundial de la Salud (OMS) el pasado 23 de julio y se encuentra en el nivel de alerta mundial más elevado posible, compartiendo puesto con la COVID-19 y la poliomielitis.
Ahora, pocos meses después de que esta rara zoonosis viral (enfermedad provocada por virus transmitido de los animales a las personas) llegara a Europa, se ha detectado en Francia el primer caso de contagio de viruela del mono de una mascota. Se trata de un perro de raza lebrel italiano que convive con sus dueños, dos hombres que también han dado positivo en los tests que detectan la enfermedad.
Se trata de la primera evidencia de una transmisión desde humanos a mascotas domésticas en todo el mundo, según indica un grupo de investigadores en un estudio publicado en la revista The Lancet bajo el título Evidence of human-to-dog transmission of monkeypox virus.
La transmisión del virus se produce normalmente a través del contacto directo con las lesiones provocadas por la enfermedad, así como por los fluidos corporales y las gotitas respiratorias de las personas o animales infectados. Todavía se está investigando la posibilidad de la transmisión sexual de la enfermedad, pues la mayoría de los contagios se han concentrado en hombres que han mantenido relaciones sexuales con otros hombres.
En los países de origen de la enfermedad únicamente había evidencias de contagio por viruela del mono en roedores y primates salvajes. Aunque la transmisión del virus entre perritos de las praderas ya se ha descrito en Estados Unidos, así como entre primates en cautividad en Europa que habían estado en contacto con otros animales infectados, la infección de mascotas domésticas como perros o gatos nunca se había descrito hasta el momento.
En el caso del contagio registrado en París, el lebrel italiano afectado por la enfermedad comenzó a presentar lesiones mucocutáneas 12 días después del comienzo de los síntomas de sus dueños. Las pruebas PCR realizadas al can arrojaron un resultado positivo y el análisis de ADN de las muestras del perro y uno de sus dueños revelaron que ambos contenían virus del clado hMPXV-1, la misma variante que circula por Europa desde inicios de abril de 2022 y que ya ha infectado a más de 1.700 personas en Francia.
Se trata de la primera evidencia de una transmisión desde humanos a mascotas domésticas en todo el mundo.
Además, las muestras de virus extraídas tanto del perro como de uno de sus dueños muestran una similitud del 100% en los análisis clínicos realizados, lo que significa que el animal contrajo el virus al dormir con sus dueños en el periodo en el que sufrieron la enfermedad.
Los autores del estudio concluyen en que no solo se trata del primer caso de transmisión de humanos a perros, sino que los síntomas del animal demuestran que estos animales no son simples portadores de la enfermedad, sino que también la sufren, sugiriendo el hecho de que se trate de una enfermedad canina como una posibilidad real. Además de recalcar que se requiere de más investigaciones en la materia, el equipo de investigadores también recalca la posibilidad de aislar a las mascotas de los individuos que hayan dado positivo con el virus.