MADRID.- El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) ganó hoy las elecciones generales en España con más del 28% de los votos y el ultraderechista Vox sería la quinta fuerza política en el Parlamento con el 12% de apoyo, según un sondeo difundido al cierre de los colegios a las 20:00 hora local (18:00 GMT).
De acuerdo con la encuesta de la cadena estatal RTVE, el PSOE lograría entre 116 y 121 escaños y el Partido Popular (PP, conservador) tendría entre 69 y 73; seguido por los liberales de Ciudadanos (C’s), con entre 48 y 49; Podemos (izquierda), con 42-45; y Vox tendría 36-38, en un Parlamento de 350 diputados.
Los independentistas catalanes del ERC habrían logrado 14 escaños, es decir, el 3,3 % de los sufragios.
Ni el bloque de la izquierda -PSOE y Podemos- ni el de la derecha -PP, C’s y Vox- tendrían, según este sondeo, los 176 escaños necesarios para obtener mayoría absoluta en el Congreso de los Diputados español.
En cuanto a la alianza liderada por los socialistas tendría más parlamentarios y, si sumara apoyos de otros partidos, podría lograr la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno.
El PSOE sacaría más de diez puntos porcentuales de ventaja al PP, con el 28,1% de apoyo frente al 17,8%, mientras Ciudadanos lograría el 14,4%, Podemos el 16,1% y Vox el 12,1% de apoyo, de acuerdo con esta encuesta de RTVE.
Otra encuesta, divulgada para la cadena radiofónica Cope, otorga al PSOE alrededor del 27% de los votos y entre 105 y 120 escaños; en tanto que el PP caería a entre 67-77 escaños debido en parte a la fuerte entrada de Vox en el Congreso, pues podría llegar a los 50 diputados.
La alta participación, que sobre las 16:00 GMT era del 60,75%, superior en casi diez puntos a los últimos comicios del 2015, y la ausencia de incidentes han marcado estas elecciones, las terceras que se celebran en menos de tres años en España y de las que previsiblemente saldrá un panorama político muy fragmentado.
Los colegios electorales cerraron a las 20:00 hora local (18:00 GMT) en la España peninsular y lo harán una hora después, a las 19:00 GMT, en el archipiélago atlántico de Canarias.
Casi 37 millones de personas estaban llamados a votar en las decimoterceras elecciones generales de la actual etapa democrática en España, entre ellas por primera vez 1,15 millones de jóvenes y otras 100.000 personas con discapacidad intelectual, enfermedad mental o deterioro cognitivo.
A dos horas del cierre, la participación en las elecciones en España se situó en un 60,75%, lo que supone 9,49 puntos más que los anteriores comicios del 2016. (Foto y video: AFP).
Pedro Sánchez, jefe de un gobierno minoritario desde junio, llegó como favorito, aunque todo indica que no tendrá mayoría absoluta, por lo que necesitaría a otros para continuar, siempre y cuando no sumen los partidos de la oposición conservadora.
Por ello, tras votar este domingo pidió “una mayoría parlamentaria lo suficientemente amplia que permita cuatro años de estabilidad”, para lograr avances “en justicia social, concordia nacional y limpieza política”, después de “muchos años de inestabilidad, de incertidumbre”.
Pero enfrente, el socialismo tiene a tres partidos que ya le arrebataron la región de Andalucía, su mayor feudo hasta hace poco: Ciudadanos, Partido Popular (PP) y la extrema derecha de Vox.
El ascenso de este último es la gran novedad en un país donde, a diferencia de casi todo el resto de Europa, la extrema derecha había sido marginal hasta hace unos meses.
Un fenómeno que los socialistas han utilizado para movilizar a sus votantes y en particular a las mujeres, dado el discurso antifeminista de Vox.
Sánchez “me parece una opción moderada. No lo ha hecho demasiado mal estos últimos meses”, dijo a AFP en un colegio de Madrid Carlos González, jubilado de la construcción.
En Barcelona, Victoria Gracia, de 59 años, dijo haber votado a Podemos “para que pacten con el PSOE y lo mantengan a raya”, y porque siente “repelús” de pensar en un ejecutivo de derechas.
Cerca de ella, la pensionista Teresa Díaz se decantó en cambio por Ciudadanos, firme defensor de la unidad de España, frente al desafío secesionista catalán. “Espero que gane la derecha y ponga un poco de orden aquí, porque estoy angustiada”.
– Lógica de bloques –
El líder del PP, Pablo Casado, dijo estar abierto a gobernar con los liberales de Ciudadanos y con Vox, un partido fundado hace cinco años y que lleva meses llenando auditorios en sus mítines por toda España.
Los sondeos auguran a Vox unos 30 escaños, si bien algunos analistas advierten que hay voto oculto y podrían obtener más.
Los tres partidos quieren “echar a Sánchez”, y los comicios se presentan como una pelea entre el bloque de izquierdas y el de derechas.
Sin embargo, subsiste una posibilidad intermedia, no desmentida por el dirigente socialista: la de entenderse con Ciudadanos, liderado por Albert Rivera, en caso de ser la única mayoría de gobierno posible.
Esto le evitaría a Sánchez tener que apoyarse en los partidos separatistas catalanes, que a cambio le piden algo a lo que él se opone firmemente: un referendo de autodeterminación.
–Los rivales de Sánchez–
El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, dijo a la prensa que hacía falta una gran participación para cambiar el gobierno y “abrir una nueva era”.
Pablo Casado, que asumió hace poco el mando del conservador PP y lo ha llevado hacia la derecha en un intento de frenar la fuga de votos a Vox, dijo que eran las elecciones “más decisivas” del país en los últimos años.
También el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, hizo hincapié en la importancia de votar el domingo.
“Mi sensación es que en España hay una amplia mayoría progresista y cuando hay participación alta eso queda claro de forma muy clara”, dijo Iglesias.
Por su parte, el líder de Vox, Santiago Abascal, que ha movido las mayores multitudes durante la campaña, dijo a la prensa en Madrid que “millones de españoles van a votar con esperanza, van a hacerlo sin miedo a nada ni a nadie”. (FUENTE: EL COMERCIO)