COZUMEL.- El candidato a diputado federal del Distrito Electoral 01, Miguel Ramón Martín Azueta, de la coalición “Por Quintana Roo al Frente”, se pronunció por generar políticas públicas adecuadas para la atención a las personas que presenten algún tipo de discapacidad, a fin de ofrecerles mejores y mayores espacios para su desarrollo.
En ese sentido, afirmó en gira realizada en esta ínsula, que se comprometió con padres de familia y con directivos del Centro de Atención para Personas con Discapacidad (CAED) en Cozumel, no solamente buscar las opciones a futuro, “si el voto me permite llegar a la diputación federal, sino de inmediato para atención a jóvenes por parte de las autoridades correspondientes”.
Miguel Ramón dijo que ha sostenido diversas reuniones y conversaciones con personas interesadas e involucradas en temas de atención a niños, jóvenes o adultos con algún tipo de discapacidad. Hemos coincidido en que Quintana Roo es un paraíso importante y que únicamente necesita una serie de decisiones fundamentales para poder hacerlo más práctico a las personas.
Por el incremento demográfico que registra Quintana Roo, este sector de la población ha aumentado significativamente; con mucho valor, con mucha capacitación, es necesario atenderlos desde diversas aristas como la movilidad, por ejemplo, para contar con autobuses adecuados que faciliten con dignidad los traslados de las personas.
De acuerdo a datos del INEGI, en Quintana Roo 40 mil 228 personas tienen alguna limitación en la actividad; de las cuales ,3 mil 521 personas tienen alguna limitación en la actividad para escuchar; 4 mil 540 personas tienen alguna limitación para hablar o comunicarse; 18 mil 492 poseen alguna limitación para caminar o moverse; 2 mil 301 personas afirman tener una limitación para atender el cuidado personal, y un mil 873 tiene una limitación en la actividad para poner atención o aprender.
En el país, 7.1 millones de los habitantes viven con una discapacidad, de acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) de 2014. Solo la mitad de los niños con discapacidad asisten a la escuela y el 30% participa en el mercado laboral.