CIUDAD DE MÉXICO.- Jugar sigue siendo una parte importantísima de la vida de un niño y es necesario para el desarrollo y la estimulación desde el primer ciclo de vida en adelante. Desde los puzzles o una pelota, hasta aquellos más complejos, el vínculo que se genera entre los adultos y los niños a través del juego es inigualable.
La llegada de los Reyes Magos, que se celebra cada 6 de enero, suele ser una ocasión en donde los más chicos reciben un presente. Los niñosmdejan la noche del 5 de enero sus zapatitos, junto con agua y pasto, a la espera de que mientras duerman Melchor, Gaspar y Baltasar hagan su magia y dejen sus ansiados regalos.
Hoy, la tecnología está presente en cada uno de los momentos de la vida desde la infancia. El problema surge cuando los chicos dejan de jugar en el mundo real para volcarse completamente a las pantallas y se reabre nuevamente un debate: ¿es prudente regalar tecnología para estas ocasiones?
Las pantallas impactan negativamente por el contenido de lo que ven o hacen los niños mientras utilizan estos dispositivos y también por todo lo que dejan de hacer, como el desarrollo de vínculos afectivos con los demás, juegos creativos, lectura, estudio y actividad física. El desarrollo del cerebro del niño depende en parte de las experiencias que vive, y la pérdida de momentos de juego creativo tiene un fuerte impacto en su fortalecimiento.
El debate surge en cada reunión social o salida a comer en familia. Ya no llama la atención ver niñas y niños pequeños con tablets o teléfonos celulares en la mesa del restaurante, o en un sillón contiguo a donde comen los adultos, en una cena de amigos. O en el colectivo. O en la sala de embarque previo a tomar un avión. O en la espera del médico. El “chupete electrónico” reemplazó a los autitos, rompecabezas, hojas y lápices de colores y demás artilugios a los que recurrían los padres -hasta no hace mucho tiempo- para entretener a sus hijos en las salidas o viajes.
Lo cierto es que las edades de los usuarios se redujeron y, en el total del tiempo destinado al esparcimiento, hubo un incremento en la participación de los dispositivos tecnológicos.
“Todo lo que tenga que ver con la tecnología tiene que estar regulado. Es muy difícil, cada vez más, decirles que no a los más chicos cuando se trata de la tecnología. Por otro lado nos tenemos que aggiornar porque vivimos en un mundo digital y tecnológico. Personalmente a mi hijo tardé mucho tiempo en darle la Play pero nos dábamos cuenta de que quedaba fuera de un montón de cosas con sus amigos. Sin embargo, hay que limitarlos para que no estén todo el tiempo frente a la pantalla. Con lo cual regalar tecnología siempre y cuando estén controlados y no sean un exceso es una realidad”, dijo a Infobae la licenciada en Psicología Lorena Ruda (MN 44247).
Hoy lo virtual, lo digital y las redes sociales son un espacio que se habita, en donde los sujetos llevan a cabo un montón de actividades de entretenimiento, de trabajo, de esparcimiento y sociales. Es lógico que en algún punto los niños también comiencen a habitarlas en el mismo sentido, encontrando en ellas una fuente de vínculo social con sus amigos y compañeros, una fuente de estímulos y de investigación.
“Creo que para todos está bueno aburrirse, incluido los niños, ya que está bueno para encontrarse con otra parte de la realidad. A medida que van creciendo, van teniendo más recursos, buscan un hobbie, tocan un instrumento, practican un deporte. Hacer nada no existe. Aburrirse genera cosas buenas también y es importante que los padres no intenten tapar con cosas este momento”, aseguró la profesional.
La importancia del juego
El juego en los niños es fundamental, no solo los divierte sino que forma parte de su desarrollo integral, es una necesidad biológica. Algunos de los beneficios del juego:
-Físico: los juguetes ayudan a los niños con la coordinación y habilidades motoras.
-Emocional: durante el juego los niños aprenden a lidiar con las emociones, como poner en práctica la empatía y la compresión.
-Social: jugar con otras personas ayuda a los niños a negociar y compartir en grupo.
-Cognitivo: los juguetes ayudan al desarrollo cognitivo en los niños.
–Creativo: los juguetes permiten potenciar la imaginación en los niños creando nuevas palabras y nuevas ideas.
-Comunicacional: los juguetes permiten intercambiar los pensamientos, señales escritas o acciones de los niños. (FUENTE: INFOBAE)