CIUDAD DE MÉXICO.- Kimberly-Clark de México descartó realizar inversiones en México en el corto plazo, debido a la desconfianza que mantiene con algunas decisiones del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador y a las señales de desaceleración económica en el país.
El anuncio de la empresa, cuyo Consejo de Administración es presidido por el empresario Claudio X. González Laporte, se dio durante la presentación de los resultados económicos de su tercer trimestre.
De acuerdo con El Economista, el director general de la empresa, Pablo González Guajardo, el corporativo se mantiene a la expectativa debido a que las políticas del Gobierno federal no son lo que les “gustaría” para invertir en el corto plazo en México.
“La economía se ha desacalorado significativamente y el consumo interno sólo esta creciendo un poco y, desafortunadamente, continuamos viendo anuncios de nuevas políticas por parte del Gobierno que podrían no ser lo que nos gustaría para comenzar a invertir en el corto plazo”, señaló González Guajardo.
El anuncio de Kimberly Clark es parte un nuevo capítulo en el enfrentamiento que el titular de su Consejo de Administración, González Laporte, mantiene desde hace años con Andrés Manuel López Obrador, actual Presidente de México.
LA CONFRONTACIÓN
Esa disputa entre el hoy Presidente, y principal líder de la izquierda mexicana en casi tres décadas, se intensificó a partir de las elecciones de 2006 y luego en las de 2012, cuando el tabasqueño perdió ante el panista Felipe Calderón Hinojosa y el priista Enrique Peña Nieto, respectivamente.
En febrero de 2018, en plena campaña para las elecciones de julio de ese año, donde terminó con un amplio triunfo, el ex Jefe de Gobierno de la Ciudad de México lo acuso de ser “perverso e influyente”.
“Claudio X. González es perverso e influyente. Participó en el fraude electoral del 2006 y, en diciembre del 2012, recomendó al gobierno que aumentara la gasolina de 10 a 20 pesos por litro, y le hicieron caso. Ahora le está pidiendo a EPN que nos robe la Presidencia. Es temible”, escribió López Obrador.
Días antes de esa precisión, el pasado 31 de enero de 2018, López Obrador acusó al empresario de visitar al entonces Presidente Enrique Peña Nieto para pedirle que se robara la elección presidencial.
El entonces candidato de la coalición “Juntos Haremos Historia” prometió precisar, a los medios de comunicación de la precampaña, los detalles de un encuentro que el empresario Claudio X. González tuvo con el Presidente Enrique Peña Nieto.
“Es de risa, pero al mismo tiempo es algo muy serio, porque el señor Claudio X. González está empeñado en hacer la guerra sucia en contra de nosotros. Y fue a ver a Peña Nieto a Los Pinos, y le pidió que se aplicara Peña Nieto a fondo en contra de nosotros, en contra mía… con lo mismo del 2006, que era yo un peligro para México. Este personaje, Claudio X. González, fue el que actuó, entre otros, junto con Fox [Vicente Fox Quesada] para cometer el fraude electoral, y miren en qué situación está el país”, planteó López Obrador en un video publicado en su cuenta de Facebook.
“Pero lo que es chistoso”, añadió el entonces precandidato de Morena, “es la contestación de Peña –esto me lo transmitió un amigo de Peña–. Palabras más palabras menos, Peña le dijo a su amigo: ‘Mira éstos, me acusan de ratero’ –porque el hijo de Claudio X. González tiene una asociación, son de esas cosas kafkianas, tiene una asociación la familia para combatir la corrupción–. Y, dice Peña, ‘vinieron a pedirme que yo evitara que Andrés Manuel ganara la Presidencia. Me acusan de ratero y de corrupto en su asociación, pero ahora quieren que yo me robe la elección Presidencial. No cabe duda que son siniestros’”.
Además, afirmó el representante de la alianza Juntos Haremos Historia, “no lo van a poder evitar: vamos a ganar la Presidencia”.
Kimberly-Clark de México fue dirigida hasta 2003 por Claudio X. González Laporte, quien hoy preside el Consejo de Administración de la compañía. En el año 2003 el empresario dejó la dirección en manos de su hijo Pablo González Guajardo.
Claudio X. González Laporte es uno de los líderes empresariales más importantes del país y ha sido un duro crítico del candidato de la coalición “Juntos Haremos Historia”, Andrés Manuel López Obrador.
González también es miembro del Consejo Mexicano de Negocios (CMN), un núcleo que reúne a varios de los empresarios más poderosos del país, entre ellos varios que se han opuesto abiertamente a Andrés Manuel López Obrador.
Por ejemplo, a finales de 2017, el empresario declaró a finales de 2017 que “no queremos dar un paso para atrás, que es lo que nos propone uno de los candidatos, que quiere regresar al siglo pasado”. El Consejo Mexicano de Negocios está integrado por 50 empresarios, entre ellos, el actual presidente del Consejo, Alejandro Ramírez, de Cinépolis, de Grupo Lala, Grupo México, Bimbo, Banamex, Televisa, ICA, Grupo UMA o Grupo ADO. También Valentín Díez Morodo, Presidente del Consejo de Administración de la organización Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) y Presidente del Consejo Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (COMCE).
Incluso, durante su campaña presidencial, López Obrador acusó al ex Presidente Carlos Salinas de Gortari y los empresarios Claudio X. González Laporte y Roberto Hernández Ramírez, presidente del Grupo Financiero Banamex, de creerse los “amos y señores de México” y “controlan” al PRI y PAN.
Mientras en mayo de 2018, el CMN publicó el desplegado “Así No”, en el que condenaban los “ataques y descalificaciones” por parte de López Obrador a los empresarios, además de negar un acuerdo con el Presidente Peña Nieto para apoyar la candidatura de Anaya.
En la recta final de la contienda electoral el CMN se reunió con el candidato puntero y, según las declaraciones de ambas partes, “fue una reunión respetuosa y se limaron asperezas”.
Incluso, Claudio X González –quien ha sido consejero de múltiples compañías mexicanas y extranjeras como Telmex, Banamex, Alfa, Carso, Modelo, Televisa, Kellog Company y JP Morgan– declaró al salir del encuentro que él y López Obrador se abrazaron.
KIMBERLY-CLARK Y SUS CONDONACIONES
La empresa Kimberly-Clark de México lleva 93 años operando en el país con productos de consumo personal como toallas femeninas, pañales, servilletas, papel higiénico jabón y toallitas húmedas.
Actualmente cuenta con 18 marcas líderes en el mercado entre las que se encuentran Huggies, Kleen-Bebé, Evenflo, Kleenex Cottonelle, Depend, Kotex, Escudo, Suavel, Vogue, Pétalo y Depend.
Durante la administración de Enrique Peña Nieto, dicha empresa fue una de las más beneficiadas por la entrega de contratos de adjudicación directa. De acuerdo con una investigación publicada por SinEmbargo, durante el sexenio de 2012 a 2018 recibió un total de 2 mil 360 contratos, con un monto de 296 millones 115 mil 818 pesos.
De acuerdo con el Portal de Obligaciones y Transparencia, el grupo empresarial no tuvo que competir para ganar un solo contrato en este sexenio, pues a través de Diconsa recibió 2 mil 360 por adjudicación directa por un monto de 296 millones 115 mil 818 pesos.
La gama de los montos de los más de dos mil contratos de Kimberly-Clark con el Gobierno va desde convenios de 745 pesos hasta los que se firmaron por más de un millón de pesos, según la revisión de contratos de este medio digital. En este sexenio los abarrotes no comestibles de la compañía no han faltado en las tiendas de la Distribuidora Conasupo (Diconsa), que depende directamente de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).
Kimberly-Clark fue una de las empresas más beneficiadas por contratos de adjudicación directa con Peña Nieto. Foto: Adolfo Vladimir, Cuartoscuro.
Kimberly-Clark de México también se benefició con 10 concesiones recibidas entre los años 1994, 1995, 1996 y 2001, para extracción de aguas nacionales y bienes públicos inherentes para uso industrial. El plazo de 6 de ellas ya concluyó, tres son por 50 años y una no lo especifica.
De acuerdo con el Portal de Obligaciones y Transparencia, Kimberly-Clark cuenta con 10 concesiones recibidas por parte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua). Tres fueron otorgadas en 1994 con una vigencia de 50 años, es decir, hasta 2044.
En cada una de estas concesiones la empresa tiene derecho de extraer aguas nacionales del municipio de Ixtaczoquitlán, Veracruz, para uso industrial.
Veracruz, Coahuila y Tlaxcala son los estados de donde el gigante papelero extrae la mayor cantidad de agua para uso industrial. (FUENTE: SIN EMBARGO)