CHILE.- Un millón de personas protestaron este viernes en las calles de Santiago, Chile, por cambios sociales.
La protesta estudiantil iniciada hace una semana contra el aumento del Metro derivó en una crisis social en Chile, con los manifestantes en las calles exigiendo un pedazo más grande de la prosperidad que hizo de este país uno de los más estables de América Latina.
Impresionante la imagen de Chile pic.twitter.com/YsAsMnZ7CU
— Ana Pastor 🇪🇸 (@_anapastor_) October 26, 2019
Chile hoy vive una jornada histórica. La RM (región metropolitana) es protagonista de una pacífica marcha de cerca de 1 millón de personas que representan el sueño de un Chile nuevo, de forma transversal sin distinción”, dijo la intendenta de la capital Karla Rubilar en Twitter, considerada una ‘outsider’ en el grupo político del presidente de derecha del Sebastián Piñera.
Camioneros y automovilistas congestionaron este viernes las carreteras que unen Santiago al resto del país para reclamar una baja en las altas tarifas del sistema electrónico de peajes.
Chile hoy vive una jornada histórica. La RM es protagonista de una pacífica marcha de cerca de 1 millón de personas que representan el sueño de un Chile nuevo, de forma transversal sin distinción. Más diálogo y marchas pacíficas requiere nuestro país ❤! #ArribaStgo💪 #RMdeTodos pic.twitter.com/RWcLBU67LD
— Karla Rubilar Barahona (@KarlaEnAccion) October 25, 2019
Tras siete días con el país semiparalizado, la bolsa se desplomó solo el lunes y luego ha seguido sin grandes alteraciones, al igual que el dólar que si bien registró una subida esta semana, cerró a un nivel similar del mismo mes del año pasado.
En su paso por el palacio presidencial de La Moneda, donde miles insultaban al presidente y a los militares que acordonan esta zona del centro de Santiago, Anguitar enfatizó: “Lo que queremos es algo bien hecho”, en referencia a los cambios sociales que reclaman.
Colosal movilización en Chile para reclamar derechos sociales y una economía que piense en la gente.
"…mucho más temprano que tarde, de nuevo se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor." pic.twitter.com/ObNTLPHrEP
— Pablo Iglesias 🔻{R} (@PabloIglesias) October 26, 2019
Este estallido sin precedentes en Chile, el más grave en casi 30 años desde el fin de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), representa un claro desafío para su reconocido modelo económico de mercado abierto.
En una semana han muerto 19 personas en violentos disturbios que dañaron seriamente la red del metro de la capital que moviliza unos 3 millones de personas a diario, y a los que siguieron enfrentamientos, saqueos e incendios en Santiago y otras ciudades.
Ante la multiplicación de denuncias sobre la acción de los militares, que están desplegados en las calles desde el sábado, la alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, la expresidenta chilena Michelle Bachelet, anunció el envío de “una misión de verificación para examinar” la situación.
El pueblo de Chile respondió a las políticas del gobierno con una marcha masiva, sin violencia y con un mensaje contundente:
"Nos quitaron tanto que hasta el miedo se llevaron".#LaMarchaMásGrandeDeChile pic.twitter.com/ZA4WUtAidB
— Ruido en la Red (@RuidoEnLaRed) October 25, 2019
De su lado, Amnistía Internacional dijo que “el mundo tiene los ojos en Chile” y anunció el envío de su “equipo regional de crisis para documentar”, junto con sus trabajadores en el país, “las graves violaciones a los derechos humanos y, posibles crímenes de derecho internacional que se están cometiendo por agentes del Estado”, dijo Erika Guevara Rosas, directora para las Américas de Amnistía Internacional.
Un exiguo aumento de la tarifa del Metro de Santiago fue el catalizador de las protestas, que han derivado en un movimiento mayor, heterogéneo y sin un liderazgo identificable, que pone sobre la mesa otras demandas, principalmente un aumento de las bajas pensiones del sistema privado, heredado de la dictadura.
Carmen Gloria Rojas Pizarro, una ama de casa de 40 años, dijo a la AFP mientras marchaba que el gobierno “ha tratado de entregar soluciones parche que no resuelven el problema de fondo que tiene que ver directamente con la desigualdad”.
En Santiago tenemos muchas diferencias entre la gente que vive en el sector del barrio acomodado y el pueblo, entonces eso no se ha abordado de la manera correcta”, indicó sobre este país en el que el sueldo mínimo es de unos 420 dólares, mientras un empleado profesional de los sectores de clase alta supera los 4 mil dólares mensuales.
El anuncio de una batería de medidas sociales por parte de Piñera el martes y su pedido de “perdón” por su gestión inicial de la crisis no surtieron efecto.
“Nos das migajas”, se leían en miles de pancartas en las marchas sobre estas medidas presidenciales.
El viernes rige el séptimo toque de queda nocturno consecutivo, entre las 23.00 (02.00 GMT) del viernes y las 04.00 del sábado.
El metro -con más de 70 estaciones dañadas, varias de ellas destruidas- funciona parcialmente en cinco de sus siete líneas, apoyado por miles de buses para trasladar a la mayoría de los siete millones de santiaguinos.
Las concentraciones de Santiago y otras ciudades muestran un rostro festivo donde los temas “El baile de los que sobran” y “Por qué no se van”, que hicieron famosa a la agrupación de rock chilena Los Prisioneros cuando Pinochet gobernaba con mano dura la nación sudamericana, suenan en boca de miles de veinteañeros eufóricos que no temen el toque de queda ni a los militares en las calles. (FUENTE: EFE)