CDMX.- El exsecretario de Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda (2012-2018), manifestó que los mensajes intervenidos por las autoridades de Estados Unidos que lo señalaban como responsable de un delito de narcotráfico y lavado de dinero “rayan la estupidez”.
La semana pasada, Cienfuegos fue exonerado por la Fiscalía General de la República al no encontrar indicios de que “hubiera emitido orden alguna para favorecer al grupo delictivo señalado”, en relación a las acusaciones procedentes de la DEA (Departamento para el Control de Drogas) que le acusaban de vínculos con el cártel H-2, de los Beltrán Leyva, y por lo que fue detenido el pasado 15 de octubre en Los Ángeles.
En su declaración del 9 de enero ante la Fiscalía mexicana, Cienfuegos recalcó que “es falso” que hubiera “ordenado o prohibido en particular que no se ejecutaran operaciones contra determinados delincuentes o grupos criminales”, puesto que además, matizó, como secretario de Defensa no le “correspondía” ejercer dicha autoridad.
Durante su intervención, que detalla el diario mexicano ‘Milenio’, Cienfuegos negó cada una de las acusaciones que las autoridades estadounidenses esgrimiernon basándose en una serie de mensajes telefónicos intervenidos a supuestos integrantes del cártel H-2, liderado por Juan Francisco Patrón Sánchez.
“Las débiles y circunstanciales evidencias en mi contra, carecen de todo sustento y son, por lo tanto, desacreditadas con suficiencia y contundencia con las aportaciones de información y probatorias que mi defensa ha hecho a mi favor”, señaló Cienfuegos, para quien una de estas personas se hizo pasar por él para engañar a uno de sus jefes y así “obtener cantidades millonarias”.
Cienfuegos aseguró que algunos de los contenidos de estos mensajes, como aquel en el que se afirma que el exsecretario estaría detrás de un intento de golpe de Estado, son “francamente ridículos” y no son más que “una burda maniobra” de esta persona para lograr más dinero.
Por otro lado, según se desprende de la defensa del que fuera secretario durante el sexenio del expresidente Enrique Peña Nieto, entre los mensajes intervenidos hay uno de ellos en el que dos supuestos integrantes de H-2 cuestionan la veracidad de que Cienfuegos fuera ‘El Padrino’, tal y como la DEA apuntó que se le conocía.
“Negligente o maliciosamente dichos agentes y los fiscales que participaron en el caso, obviaron las intercepciones de las comunicaciones en las que manifiestan sus graves dudas sobre la identidad de ‘El Padrino’ y proporcionan una descripción notoriamente discrepante con la del general”, señalaron sus abogados.
“Concluyen que en realidad “su padrino” no es el general y principalmente la investigación omite en acreditar la causa probable que explique por qué uno de los más prestigiados militares mexicanos, (…), en el momento más encumbrado de su carrera (..), se prestaría a colaborar con un presunto narcotraficante de poca o nula importancia”, recalcó la defensa. (Proceso)