JALISCO.- La noche del 22 de octubre un novio que acababa de casarse en una iglesia de Caborca, Sonora, fue asesinado a balazos en un ataque directo. De acuerdo con una de las líneas de investigación de la Fiscalía General de Justicia del Estado de la localidad, la agresión armada iba dirigida a otra persona.
Tras los exhaustivos trabajos de investigación, acciones de inteligencia y entrevistas a testigos que levantó la Fiscalía en las últimas 24 horas, uno de los enfoques de las indagatorias que ha tomado relevancia es aquel que indica que el novio, identificado como Marco Antonio Rosales Contreras de 32 años de edad, pudo ser confundido con alguien más.
Según la dependencia, la agresión estaba planeada en contra de otra persona que ese mismo día también se había casado; no obstante, la víctima terminó siendo Rosales Contreras.
“El ataque directo a Marco Antonio iba dirigido a otra persona quien el mismo día contrajo nupcias en otra ciudad y que podría ser el móvil de la agresión, que culminó con la vida de la víctima y lesionó a una mujer, al concluir la ceremonia religiosa”, dijo la dependencia la madrugada del lunes 24 de octubre.
Dicha línea de investigación tomó importancia después de que los elementos de la fiscalía aplicaron los peritajes de Trazabilidad Balística, y varios trabajos de seguimiento, en donde confirmaron que fue un ataque directo.
Horas antes, la Fiscalía indicó que había sido de su conocimiento que un hombre, al que ya están investigando, podía tener una posible relación con los hechos, ya que fue ingresado a atención médica por presentar lesiones de arma de fuego que ocurrieron en otro evento no relacionado. Asimismo, adelantaron que Marco Antonio habría sido asesinado por un sicario solitario.
“No se descarta ninguna línea de investigación y se realizan todos los peritajes de Criminalística y Balística de Campo necesarios, a fin de esclarecer plenamente los hechos y dar con los responsables para hacer justicia”, aseveró la Fiscalía.
Esta información surge luego de que el gobernador de Sonora, Alfonso Durazo, dijo para medios de comunicación que el asesinato del novio no debía ser motivo para que hubiera psicosis entre la ciudadanía, adelantando que la posible causa de lo ocurrido fue un ataque directo.