En Xcalak, en la frontera sur de Quintana Roo, un grupo de por lo menos ocho trabajadores mayas fue privado de la libertad por sujetos fuertemente armados; los tres órdenes de gobierno activaron los protocolos de búsqueda luego de denuncias recibidas por la desaparición de personas.
De acuerdo con reportes de aquella entidad, el secuestro ocurrió en el rancho costero Loma Bonita, dedicado a la prestación de servicios turísticos en ese poblado ubicado en los límites fronterizos con Belice. Durante el viernes, la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo ha confirmado siete denuncias interpuestas ante el Ministerio Público para esclarecer los hechos.
Otras versiones indican que la cifra de personas desaparecidas es de 12, además que al momento del ataque hubo disparos en el lugar, que dejó algunas personas muertas, aunque hasta el momento la autoridad ministerial no ha confirmado los decesos.
Medios de comunicación de aquella entidad reportan que uno de los trabajadores logró escapar tras esconderse en el mangle y fue quien dio parte a los familiares sobre el secuestro y la supuesta muerte de algunos de sus compañeros, quienes en su mayoría provenían del poblado de Nicolás Bravo, ubicado en el municipio de Othón P. Blanco.
Fuentes indican que la desaparición de los trabajadores mayas podría estar relacionado con la entrada al país de sustancias prohibidas por esa frontera, para su distribución en los destinos turísticos de Cancún y la Riviera Maya.
Xcalak se ubica en el extremo sur de la Reserva de la Biosfera de Sian Ka’an, una de las zonas del país más famosas por su enorme cantidad de recursos naturales. Su complicado acceso permite la conservación de fauna y flora acuática, aunque también la realización de actividades ilícitas que se deja ver en los constantes recales de paquetes de droga en sus playas, según reportes de medios de comunicación quintanarroenses.
Actualmente autoridades de Quintana Roo libran una batalla contra el crimen organizado que se deja ver en diversas ejecuciones de manera cotidiana en los destinos turísticos del norte de la entidad. El próximo 24 de septiembre el gobernador Carlos Joaquín González dejará el cargo con un crecimiento de hasta el 160% de homicidios que se han registrado durante su sexenio en comparación con la anterior administración estatal.
Recibirá el cargo Mara Lezama Espinosa, de Morena, quien antes fue presidenta municipal de Benito Juárez, donde se ubica Cancún, el cual ocupa el lugar 14 de los municipios más violentos de México.